En mi pueblo Fukushima los que se cumple 20 años en este año hoy han celebrado el día de Seijin shiki. Es una ceremonia de ser mayor de edad con sus responsabilidades y libertad dentro de la sociedad.
Muchos de la zona de restricción lo celebraron igualmente. Eran la última promoción que pudieron terminar sus estudios de educación secundaria en sus aulas originales.
15 años tenían cuando comenzaron las tragedias sin fin.
A muchos de ellos lo que ocurrió en 2011 creo que le grabaron en su corazón y quieren dedicarse al trabajo que pueda ayudar a recuperar lo que perdieron en su pueblo.
Han tenido que vivir la vida escolar que no imaginaban estos 5 años en los sitios que decidieron sus padres o sus municipios lejos de sus amigos o vecinos contra de su voluntad. No tuvieron elección. Habrán visto a llorar y gritar a sus pedres como tuvo que hacer mi sobrina.
Es una parte que no se ven cuando se hablan de Fukushima.
Las noticias sensacionalistas hablan sólo de la cntaminación y las enfermedades de tiroides.
Pero uno de los daños más grave de la historia de Fukushima es lo que obligó el accidente nuclear a la comunidad. Desde lejos es muy dificil de verlo.
Perder los materiales como terrenos y casas se puede recuperar con dinero. Pero entorno de la vida como el vecendario o la amistad no se puede recuperar facilmente.
Según vayan levantando la orden de restricción de los municipios unos pocos mayores regresan a su casa original. Pero los jovenes y niños no. Demasiadas mentiras han tenido que oir y ver los habitantes para tomar la decisión. Mentiras oficiales.
A pesar de éso los mayores pensando en lo que les quedan de vida prefieren estar donde había hecho la vida.
Dicen que Alemania tomó la decisión de dejar la energía nuclear 4 meses despúes del accidente nuclear de Fukushima Dai-ichi basando a ética.
Me parece correcto. Una cosa que no supo hacer nuestro gobierno.
Es la diferencia de una nación que había sabido enfrentar la historia verdadera y otra que no ha sabido hablar de lo que ocurrió realmente después de la segunda guerra mundial.
El precio de vida y la ética entre dos país derrotados tomaron dos caminos diferentes.
Hemos visto muchas tonterías increíbles y antiéticas en estos 5 años sobre Fukushima.
No decir por donde iba la disperción radiactiva por no cundir el pánico, Ocultar la contaminación, manipular los aparatos medidores del nivel de radiactividad, la famosa frase del primer ministro 'Under control', subir el nivel permitido de radiactividad porque no era posible bajarlo después de descontaminar, controlar a los medios de comunicación y a los médicos, hacer regresar a la pobulación porque se le cae encima los juegos olimpicos de Tokyo 2020, reactivar los reactores nucleares parados, venderlo fuera de país etc.....
Todo porque ha habido unas pocas víctimas en un pueblo de menos importancia.
El pueblo que sigue viviendo muchas personas como otros sitios del país.
Mi familia intentando hacer la vida de todos los dias.
Con un miedo en el fondo del cuerpo.
Las gaviotas y otros seres viven como si nada hubiera ocurrido.
Ahora el ministerio de medioambiente está intentando recicular las tierras contaminadas para la construcción en Fukushima. Porque ningun otro pueblo fuera de prefectura de Fukushima lo acepta a guardar.
No os olvidamos, mucha fuerza! Necesitamos un nuevo modelo energético! Gracias por seguir contandonos todo lo que pasa.
ResponderEliminarUn abrazo!
Muchas gracias por su comentario. No sabe cúanta fuerza me acaba de dejar.
ResponderEliminarUn abrazo.