Estoy contando los días para irme a mi pueblo. Fukushima donde nací.
La recta final me hace muy larga. Esta vez más porque hace 1 año que no veo la cara de mi familia. Mis sobrinos estarán muy grandes que ya no me hablarán. La edad de pavo.
Pero bueno. Tengo ganas de beber el Sake de la tierra con mi hermano y mi padre.
Mi madre sabe que me gusta mucho el pepino que cultiva ella en su pequeña huerta.
Hoy en mi pueblo ha marcado 35 grados que es demasiado. Espero que mi madre esté aguantando este calor. Mi padre decía que muy a menudo se maleaba con el calor.
Hace 71 años de hoy la ciudad de Nagasaki se convirtió en una ciudad calcinada.
Por consecuencia de la segunda bomba Atómica lanzada por los Estados Unidos.
Aquel entonces mi país Japón no tenía ninguna opción de dar la vuelta a la situación.
Pero los aliados decidieron lanzarla para rematar aquella guerra. O tenían que demostrar la fuerza nuclear a otros paises y experimentar en los cuerpos de millones de víctimas.
Hoy 09 de Agosto la ciudad de Nagasaki ha tenido una ceremonia conmemorativa de la paz como otros años. La lista de víctimas mortales por la bomba ha contado 172.230 hasta hoy. Igual que Hiroshima los supervivientes de las bombas, la mayoría ahora tienen alrededor de 80 años y temen ya su muerte. La muerte que podría ser fin de sus testimonios de aquella masacre.
Para evitar que se mueran sus historias con ellos dedican sus últimos tiempos de la vida contando la verdad a los niños en los colegios de la ciudad. Algunos llevan la maqueta de la bomba en tamaño real para que los niños sienten la realidad más dolorosa de su pueblo. El sufrimiento hay que seguir contando de generación a la siguiente generación.
Es la única forma de mantener viva una cara oscura de nuestra historia.
Su deseo de tener la paz en el mundo entero para nosotros sería inimaginable porque la herida de aquella guerra todavía no se les acaba de cerrar. Vivirán con ello y lo llevarán al otro mundo también.
Aun así el primer ministro Shinzo Abe quiere tener el ejercito armado que puedan matar cambiando la ley. Es cierto que mi país tiene amenza de los vecionos permanentemente.
El loco del Corea del Norte no dejan de lanzar misiles, el vecino gigantesco China todos los días envía cientos de barcos suyos al mar de nuestro territorio...etc.
¿Para qué debemos tener las armas? Si es para frenar las locuras, deben haber otras formas en vez de enviar las tropas del ejercito de autodefensa con las armas para matar a la primera línea de la zona de confricto del mundo como los Estados Unidos.
Demasiada sangre vemos todos los dias en las noticias por culpa de los políticos.
El Agosto de 1945 nos pereció que era el fin de la energía nuclear para nuestro país.
Pero pocos años después comenzó la era de la misma energía nuclear. Camuflando su nombre. La bomba nuclear lo llamaban 'GENBAKU' y los dirigentes del país lo cambiaron por 'GENPATSU'. Por supuesto hubo una propanganda másiva en todo el país con una excusa de prometer el desarrollo economico tras la derrota de la guerra. Desgraciadamente funcionó y Japón logró ser un país economicamente muy potencial en la década de 80. Apenas tardó 40 años en levantarlo desde cero.
Ese subidón en el mundo nos trajó un regalo llamado la arrogancia.
Sobre todo el el mundo energético del país. Las grandes empresas producían la electrocidad y dinero como churros. Compraban a la gente de los pequeños pueblos, los medios de comunicación, los votos de la elección, garantizaban los trabajos de jóvenes del pueblo y mucho más. Han llegado a ser como una máfia oficial organizada.
Para los pequeños pueblos sin recursos industriales sería como un diós porque les daban trabajo y el dinero que establecía la ley sobre esta energía. Tenía la misma función que el Ópio que metieron a China los britanicos hace tiempo.
Pero despúes de dar y controlar tantos analgésicos los propios distribuidores de la energía nuclear ya no saben no depender de ello.
Tras el accidente de mi pueblo Fukushima los reactores número 1 y 2 de Takahama, el de Mihama que relativamente están cerca de Kyoto y en esta semana creo que el de Ikata en la isla de Shikoku va a tener el visto bueno de la comisión de regulación nuclear para reactivar a pesar de tener 40 años de su vida. Una cosa que contradice a la promesa que nos había hecho el gobierno tras el accidente nuclear. Otro reactor rápido importante de Monju no deja de tener problema de negrigencia en los chequeos de seguridad......En fín. No está nada claro el tema de seguridad en las plantas nucleares en mi país.
Cerca de la planta nuclear accidentada de Fukushima los municipios de Futaba y Okuma intentan construir cuanto antes el almacen temporal de los residuos contaminados. Pero hoy por hoy el país sólo ha conseguido llegar a un acuerdo con 234 propietarios de los terrenos que ni llega a un 5% de 16 kilometros cuadrados previstos. A este superficie incluyen los terrenos públicos de estos dos minicipios que ya han cedido al país. No va a ser nada facil. Porque no está demostrando su buena fé para los que vivían y han perdido su tierra. Como me comentaba mi cuñado. Para conseguirlo el país tendrá que respetar primero el sentimiento de esas personas.
A parte de los juegos Olimpicos de Río la noticia importante de estos días en Japón ha sido posible abdicación del emperador Akihito. Teme en su situación de salud por la edad. Habló públicamente en la tele ayer. Dice que no le ve cápaz de cumplir con sus obligaciones de estar con el pueblo y quiere delegarlo a su hijo pronto. Lo veo muy normal. Aquí también el rey anterior lo hizo hace años. El cuerpo a veces no funciona como queramos que siga funcionando.
El emperador actual también es uno de los muchos que desea la paz en este mundo más que nadie. Tras la guerra mundial sobrevivió por los pelos estando en una situación muy delicada y toda su vida se ha dedicado estar al lado de la gente del pueblo que sufrían por los desastres.
Hoy especialmente deseo que desaparezcan las guerras y las matanzas sin sentido en el mundo. Y que nunca jamás se repita las tragedias de Hiroshima y Nagasaki en ningún sitio del mundo. Podemos vivir sin energía nuclear.
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