miércoles, 10 de enero de 2018

LAS PALABRAS QUE DEJARON MIS SOBRINAS DE FUKUSHIMA

Un poco tarde. Pero más tarde que nunca. ¡Feliz año nuevo a todo el mundo! 
Parece mentira que ya haya pasado 10 primeros días del 2018.
Esto cada vez más rapido va.
Los 10 bonitos días con mis sobrinas como podéis imaginar se fueron volando y los reyes del oriente me dejaron el cuerpo hecho una pena. Uhiii, la edad no perdona. 

El primer día del año tuvimos buena intención de ir al mar para rezar al primer rayo del sol. Fue imposible y nos conformamos rezando a la primera puesta del sol desde avión.
Los tres rezando hacía ventana para que 2018 sea un año tranquilo. 


Hoy en la primera entrada de mi tema quiero escribir lo que me han contado ellas sobre lo que ocurrió hace ya casi 7 años y lo que han sentido durante todo este tiempo. 
Es la primera vez que me he atrevido preguntarselo. Ha sido un tabú hasta ahora.
Creo que saliendo de su entorno de Fukushima han tenido la facilidad de contarmelo aquí en España.

El segundo día de su llegada la sobrina mayor se quejó de cansancio porque estaba recien recuperada de resfriado. Se quedó en casa y a la pequeña la llevé de paseo por centro para que viera las iluminaciones Navideñas del centro de Madrid. Contenta estuvo. Parecía una niña pequeña sacando muchas fotos con su movil. Luego fuimos a cenar.
'Me gustan las gambas.' Decía en Español ya los últimos días de viaje.
Me llenó tanto verla sonriendo......Aquel día ella tenía sólo 14 años.

Allí le pregunté '¿Cómo ha sido estos años desde aquel día?'
Me empezó contar.

'En principio no sabía donde estabamos porque teníamos que cambiar tantas veces del sitio de evacuación. Luego tuve que ir al colegio que a nadie conocía. Todos me miraban muy raro y me hacía sentir muy incómoda. 
Un día no quise ir a ese colegio y mi madre me dijo llorando que tenía que ir. Sabía que mi madre también lo estaba pasndo muy mal y preferí ir al colegio que verla a sufrir.
Terminé 1 año que quedaba de la escuela secundaria en ese colegio que sólo me hacía olvidar de cosas malas jugando al baloncesto.
Luego fuí al instituto y seguía jugando al baloncesto. Mis compañeras del equipo me protegía. Por lo menos eso sentía cuando estaba con ellas.
Hasta los 18 que acabé el estudio de instituto claro que había varios episodios de bullying por ser de Okuma. Cada vez que me pasaba algo parecido me preguntaba ¿Porqué?
Entrando a la universidad cerca de Tokyo ya sabes, las primeras preguntas de todo el mundo. ¿De donde eres? Para mi era una cruz. Si contestaba que era de Fukushima, algunos me miraba con la cara de pena y ahí cortaba la conversación. Otros me empezada preguntar sobre mi pueblo con buena intención o mala intención. Tenía que seleccionar a  las personas que podía contar la verdad. Me cansé del tema y procuro no decir mi origen.'

Casí cómo imaginaba. Luego añadió.

'Muchas veces mi madre y yo nos apoyabamos mutuamente diciendo lo que no deberíamos decir en voz alta. A lo mejor si no hubiera ocurrido este accidente, no habría podido entrar a esa universidad. Rebuscando algo positivo para sentir mejor.' Se reía.

Demasiado real la historia que escuché de ella y decidí de nuevo seguir luchando.

En el viaje al norte le tocaba a ella ponerse enferma. Cogió algún virus de moda.
Dos días estuvo en la cama sin poder salir la noche vieja. Las uvas si que pudo comer con la braga roja puesta. Algún recuerdo se habrá llevado de la noche vieja Española.

En el tren de regreso a casa tuve tiempo de hablar con la sobrina mayor.
La que se despidió de mí hace 28 años en el aeropuerto de Tokyo. Aquel entonces era la única sobrina mía existente en el mundo. Y ahora tengo 6 sobrinos en total.
Ella me dice,

'Desde aquello me molesta, sobre todo últimamente que todo el país va emocionandose  por los juegos olimpicos de Tokyo 2020, cada vez que veo en la televisión o redes sociales hablando bien de Japón los extranjeros ¡Qué bonito país! ¡Increíble la gente de este país!
Hay algo que no me convence. Pasó lo que pasó y luego mi país no tiene ninguna intención de acabar con la energía que tanto daño nos ha hecho. La mayoría de gente ya no se acuerda de que existimos en mismo país. No creo como dicen los extranjeros que es un país tan maravilloso. A mí me parece que es un país de mucha mentira y a los débiles como nosotros les recortan sin piedad. Es un país cruel. Me ha desepcionado mucho.'

Le estuve contando cómo funciona el mundo de la energía nuclear en el mundo. Que es un mundo que se mueve por interés de muchos países y es capaz de manipular la política de los países de gran potencia. Pero que es muy importante ver el mundo entero para sacar la propia opinión de los sucedidos. Que intente tener la visión global las veces que se pueda estudiando las historias y políticas de cada país.

En esta visita a España las dos jovenes sobrinas han aprendido algunas frases Españolas, las costumbres y el cariño de la gente de aquí. Estoy seguro de que vuelvan la próxima vez brindadas de idioma y conocimientos. Eso espero. 
Lo mejor es que les ha gustado mucho. Por algo corre la misma sangre que la mia en sus
venas. Puedo estar orgulloso de ellas.

Mientras las noticias hablaban de posible reactivación de los reactores de la prefectura vecina de Niigata que posee la empresa responsable del accidente de Fukushima.
En otro sitio decía que la nueva planta nuclear que va a construir la marca Hitachi en Reino Unido será garantizada por el gobierno nuestro si ocurre cualquier accidente en el futuro. Parece una broma de mal gusto. Pero es verdad.
¿Porqué apostar tanto en esa energía y porqué tenemos que pagar hasta las indemunizaciones de otro país? No entiendo. Lamentable política diplomática. 
No saben que muchos países se están riendo de ello. 

Lo que puedo estar seguro es que mis sobrinas nunca jamas estarán a favor de la energía nuclear. 
Saben por sus propias experiencias. 
Ellas son verdaderas diplomáticas que no mentirían nunca al mundo sobre esta energía.

Termino con mis deseos de que 2018 sea un año de paz.