domingo, 11 de mayo de 2014

LA ADMIRACIÓN ANULADA POR LA DESEPCIÓN, FUKUSHIMA

Hoy en mi país ha sido el día de la madre. Aquí en España se ha celebrado los actos por día de las mujeres. En Fukushima por ser día 11 del mes, los policias y los bomberos han hecho la busqueda en la zona costera de Namie como el mismo día de otros meses.
Lorca conmemora 3 años del terremoto demostrando el avance de su recuperación. Poco a poco van entregando la llave de nuevas viviendas a los afectados.

En el mundo de deporte, el tenista Japonés Kei Nishikoori ha estado a punto de ganar el tornero de Master 1000 aquí en Madrid contra Rafa Nadal. Pero no ha sido posible por lesión de espalda. Lastima. Ha jugado muy bien el primer set con muchas ganas y muchas jugadas buenas. No tenía nada que avergonzarese frente a Nadal ganando 6-2 a Nadal. Su dolor le ha impedido terminar el tercer set después de ceder el segundo set a Rafa y al final ha tenido que retirarse. Hasta último momento ha querido estar de pie en la pista.
El dolor que me suena. Yo también tengo unos discos descolocadas y el cansancio acumulado nunca me perdona aunque tenga ganas de roglar cualquier cosa.
Espero que se recupere pronto y venga el año que viene a luchar de nuevo.
Es el primer Japonés que gana el puesto 9 en el top10 de ATP. Tiene mucho que esperar.


La admiración a los compatriotas Japoneses poco después de las tragedias del 2011 sin duda recorrió por todas partes del mundo. Éso a nosotros mismos nos ha hecho reconocer cómo es nuestra identidad y hay gente que dice 'nos ha recordao amar la pátria por primera vez despúes de la ocupación Americana'.

Mucho nos significó 11 de Marzo del 2011.
Sobre todo a nosotros de Fukushima.
En unos días fuimos orgullosos de ser Japonés y unos días después comenzamos dudar del país. Si es que nos estén mintiendo los políticos todavía, ellos serían de otro tribu. Nosotros somos Japoneses. Los autenticos sienten el dolor que tiene mi puueblo Fukushima y nosotros no dudaríamos de ellos.

Este viernes han llegado al mercado más grande del mundo, Tsukiji los gallos pescados en nuestra costa Iwaki. Se han vendido por el mismo precio que otras costas decía la noticia del pueblo. No sé si están haciendo bien hacer circular estos pescados a todo el país.En teoría pasan las pruebas del nivel de radiactividad. Para los marineros es buena noticia y para las madres de todo el país no creo que sea muy buena noticia......

Hace unos días un trabajador de la planta nuclear comentaba que ¡por fin! llegó un helicóptero a Fukushima Dai-ichi para trasladar el herido o un enfermo al hospital de Iwaki. Parece mentira que en estos tiempos no han tenido este servicio sanitario en un lugar más peligroso de Japón. Hoy en día cuenta con 6000 personas trabajando.
Algunos trabajadores han muerto o han sufrido por haberles tenido que trasladar al hospital tardando 1 hora en coche hasta Iwaki. 
Es un punto increíble de Japón que normalmente no se ven los de fuera.

Tengo unos amigos ingenieros Españores que ya no esperan nada de lo que hacen los japoneses en mi pueblo.Totalmente desepcionados. Me muerdo los labios.
Los japoneses han ganado la admiración del mundo y el gobierno con Tepco van ganando la desepción del mundo. 
Nos hubiera gustado que actuara de otra forma sobre la energia nuclear. 
Parece que no tiene huevos para plantar la cara a grandes potenciales del mundo.

Ahora mismo el sacrificio de Fukushima no está sirviendo nada para el mundo.

Muchas veces pienso en mis sobrinos de allí. '¿Cómo estarían en el año 2030? ¿Tendrían alguna secuela de Fukushima?' Sé que es una tontería pensarlo ahora mismo.
Pero en Fukushima no existe ninguna garantía en la salud de los niños.
El otro día viendo la película 'Ocho apellidos Vascos' pensé en la generación de mi casa.
5 generaciones sin mezclar la sangre de Fukushima que yo sepa. 
Dentro de unos años ¿habrá problemas para casarse los niños de Fukushima con los que no son de Fukushima? Muy posible. Les pasaría algo parecido a los de Hiroshima y los de Nagasaki.Que lo han tenido después de la guerra y sigue teniendo problema de la descriminación por parte de sociedad cruel. 

Viven en un país que no protege a los niños.
La mayor desepción la tenemos los de Fukushima. 

Pero nunca perderémos el honor aunque estemos hechos polvos como Nishikori de Madrid Open.
Quizá la admiración conviva con la desepción para poder superar la dificultad en Fukushima.

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