domingo, 11 de septiembre de 2016

EL SONIDO DEL PIANO, FUKUSHIMA

'Estoy en la gloria cuando encucho el sonido del piano de los nietos cada tarde que me echo una siesta en casa. Su sonido me hace el hombre más feliz del mundo.'
Ha sido una frase de mi padre. Él que siempre está ahí rodeado de su mujer, su hijo, su nuera y los tres nietos que crecen cada día debajo de mismo techo. 
La situación inmejorable sin lugar duda esperando cumplir sus 80 años.
Si no hubiera ocurrido lo del Marzo de 2011, su guión de vida sería perfecta sin ningún tipo de preocupación sobre la salud de los nietos.


Después de haberse maleado y un día más tarde del gran tifón número 10 de este año mi padre quiso cumplir su promesa de llevarnos a mi hermana y a mí un sitio pintoresco de Fukushima. Ouchijuku. Está a 150 km hacia interior de nuestro pueblo. En la época de Samurai era como un lugar de descanso para los viajeros que pasaba del norte al sur o del sur al norte. Dejando pocas distancias al castillo de Tsuruga-jo, Aizu. Donde estaba el gobernador de la zona. Estas casas se conservan de la forma antigua con los tejados de paja en una calle que mide apénas 1 km de longitud. Pudimos comtemplar el cambio de tejado de una de ellas que nos pareció bastante complicado. En el pequeño museo explicaba un poco. Había como 5 capas diferentes de pajas porque este sitio el invierno es muy duro y los tejados tienen que aguantar el peso de nieve. 
Algo parecido está en otro lugar del país. Shirakawago, cerca de Takayama en el centro de Japón que se ha convertido un punto obligatorio de visitar para turistas extrangeros. En cambio Ouchijuku no está explotado tanto y se puede contemplar la aldea con naturaleza. Creo...Hemos visto turistas japoneses de otras prefecturas. Pero ningún extranjero.   

Parecía mentira que había pasado la lluvia del tifón sólo un día antes. Como véis hizo un día precioso. Dentro de unos meses se maquillarán estas casas de blanco y sería muy complicado de llegar a esta calle. Estuvimos unas horas hablando con la gente que vive en una de ellas y comiendo los platos típicos de la zona. Soba, tallarines que se come con el puerro y el pescado del río que dicen que sólo viven en aguas limpias, Ayu.
Los comimos sin pensar si estaban con radiactividad. Como otros días. Estando allí es un tabú preguntarlo. Además somos mayores para preocuparnos de nuestra salud en 40 años.


     


Parece un blog de los viajeros....Podría ser.....

A la vuelta mi padre nos dijo 'Ha sido la última vez que vamos de viaje conduciendo yo. La próxima conducís vosotros.'  Lo sabíamos y nos ibamos un poco de vigilantes por si frenaba muy tarde. Y le respetamos su voluntad de querer conducr en este viaje.
Creemos que está luchando con su vejés. Todavía no puede aceptar lo que no podría hacer en pocos años y quiere probar uno a uno y reconocerlo. 
Le darémos todo el tiempo que quiera. 

Esta vez dice que va a vivir 1095 días más. Siempre que me vaya nos dice los años restantes de su vida y esta vez lo ha cambiado por días. 1095 días son los días que tienen 3 años. Según él es su nuevo objetivo de superar la vida de su padre. A nuestro abuelo.
A veces pienso que a lo mejor es una sabiduría de los mayores. Quizá nos está avisando poco a poco que no va a estar para siempre. Esperamos que nos cuente su objetivo de vida para muchos años más.

Hoy en NY ha cumplido 15 años del atentado del 11-S. Gran masacre de la historia.
En la zona afectada del terremoto y tsunami del 11-M de mi país muchas personas han recordado aquella tragedia por cumplir 5 años y 6 meses. Maldito día 11 para el mundo.
En mi pueblo Fukushima ha habido la busqueda de las 197 personas desaparecidos como el día 11 de otros meses. No me agrada nada el día 11 de cada mes. Pero al mismo tiempo es una oportunidad de reflexionar sobre muchas cosas de la vida y rezar por las vidas perdidas en unas situaciones sin piedad.    

El reloj de nuestra vida sigue avanzando aunque algunas veces prefieras parar. Sin duda vamos desgastando nuestra vida cada día. Me gustaría dar un sentido a la vida que queda y algún día quiero sentir como mi padre.

Como el hombre que ha cumplido sus deberes de la vida. Escuchar el piano que practican los niños en una siesta.  

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