Parece que me estoy reiniciando a mi mismo.
De nuevo estoy en una fase. La que no quieres estar con la gente porque no estas seguro de poder ser amable con nadie. O me lo estoy inventando.
El otro día pregunté a un amigo monje budista '¿Cómo puedo mantener la mente y el corazón en calma?'
Me contestó 'Según Buda el corazón es como si fuera el toro alboroto. Imposible de controlar. Intento conseguir esa calma entrenandolo. Pero muchas veces pienso, no estaría nada mal seguir haciendo lo que me de la gana y morir.'
Un alivio saber que un monje piensa igual que yo.
Un día como hoy hecho de menos a mi familia de Fukushima y mi cabeza da vuelta sin ningún rumbo. Me acordé de una pintura.
'NIJIIRO NO OOKINA HANA DOKEI(GRAN RELOJ DE FLOR CON COLORES DE ARCO IRIS)' se titula según su autor. Es otra obra de mi sobrina de 11 años recién cumplida. Nos gusta como dibuja y nos sorprende cada vez que pinta. Creemos que su cabeza está hecha por algo que no tenemos ninguno de nosotros. En la vida cotidiana es una niña muy libre y le gusta pedir a su abuelo lo que acompaña para tomar el sake como Surume(calamar seco). Nos hace una ilusión por si va a ser nuestra heredera como gran bebedora de Sake. Tontería que pensamos los mayores de nuestra casa.
El tema de mi pueblo es demasiado cansino que me consume mucho. No solamente a mí sino a todos los de mi pueblo. Pesa.....
Desde aquel día 11 de Marzo tenemos que estar pendiente de muchas cosas que la gente normal no tienen que pensar.
La radiactividad que no se ve, la planta nuclear por si hay algún accidente, los rumores dañinos, la política por si nos engaña y la familia si se pone enferma.........
Todo esto son sobrecargas que tenemos aparentemente haciendo la vida normal.
Muchas veces pienso '¿Cómo estarían viendolo los niños?' Intento ponerme en su piel.
Cuando tenía la edad de mis sobrinos pequeños me importaban las galletas,dulces, sacar buenas notas en el estudio y en las competiciones deportivas para ganar admiración de mis padres, mis abuelos y mi bisabuela. Las cosas que ocurrían en en entorno no me importaba si estaba con ellos. Crecí dentro de una familia de 4 generaciones felizmente en el tiempo de paz. Si me hubiera tocado vivir el tiempo que están viviendo mis sobrinos, no sé si me hubiera podido hacer lo mismo.
Ellos son mucho más sensibles que nosotros y estoy seguro de que sienten mucho estrés.
Ayer leí una noticia de la opinión de los medicos de Fukushima después de haber hecho las pruebas de tiroide a todos los niños. Decían que es muy difcil de pensar que 103 niños detectados con el cancer de tiroide tengan alguna relación con el accidente de planta nuclear de Fukushima Dai-ichi. Según su estudio en sus ADN no tiene la misma tendencia que la ADN de los niños de Chernobyl. Por eso no relaciona con el accidente.
Aparentemente suena como una buena noticia. Pero yo creo que no.
Es lo que dice el medico vendido al mundo de energia nuclear y al gobierno que nunca nos diría en contra de ellos.
Ojala que no salgan problemas en los niños de Fukushima incluyendo a mis sobrinos.
2837 habitantes de Iitate acaban de demandar al gobierno y a Tepco por la perdida de su pueblo. Uno de ellos comentaba 'Si no les demandamos, el mundo nunca recordará que hubo nuestro pueblo. Tenemos que hacerles saber que hemos perdido el pueblo entero.'
También les ha demandado la familia del hombre de 102 años que se suicidó ahorcandose en su habitación tras saber que tenía que abandonar su casa el día 12 de Abril de 2011.
Es del mismo pueblo de Iitate. El pueblo que el gobierno no dió la orden de evacuación hasta 1 mes después del accidente nuclear. La gente de este pueblo tuvieron que vivir con el nivel muy alto de radiactividad por clara imprudencia del gobierno y la empresa Tepco todo ese tiempo.
La era del nuevo gobernador de Fukushima comenzó el pasado día 12 de Noviembre.
Nos promete reconstruir lo que hemos perdido por las 3 tragedias. Pero le falta la chispa.
Un hombre demasiado conservador que quiere seguir por el mismo camino que el anterior.
A ver si sabe tomar el mando de la flota medio hundida con el cargamento lleno de residuos y aguas contaminados casi abandonada por el mundo.
Últimamente en las noticias de mi pueblo sólo destacan los indicios de la reconstrucción.
En la playa de Minami Soma acaba de comenzar la construcción de la base del gas LNG.
Cada vez que veo esas noticias 2 cosas siento en mi mente.
¡Qué bien que vaya arreglando el pueblo!
¡Qué cabrones!
Los grandes contratos de obras públicas los llevan los grandes constructores del país como pasan en todo el mundo. No lo pueden llevar los locales. El esquema del mundo de economía siempre favorece a los más poderosos en cualquier situación.
El país inyecta el dinero público a Fukushima por motivo de acelerar la reconstrucción y ese dinero termina en grandes empresas que tienen acciones de las empresas energéticas como Tepco.
Por otro lado no paran las acciones solidarias por parte de buenas personas.
Los niños pequeños de Suzuka, la ciudad del circuito automovilístico de la prefectura de Mie estuvieron recogiendo las bellotas para enviarlo a los niños de Fukushima para que puedan tocar los frutos del otoño. Una obra bonita de los pequeños de 3 a 5 años.
La pintura de mi sobrina creo que describe el deseo de ella.
El deseo de querer ver el mundo lleno de colores en Fukushima. Lo ha pintado en una flor muy muy grande.
Mi moral no me deja estar con los brazos cruzados.
Los niños de Fukushima no merecen tener tantas basuras hechas por nuestra generación.
No tengo tiempo de estar hundido.
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